Reputación: el posicionamiento de las personas
Reputación, es la opinión, fundada o no, que algo o alguien goza en un conjunto social.
La buena reputación es sinónimo de prestigio, notoriedad y buen nombre, significa que las personas confían; la mala reputación equivale a desconfianza y en este caso las personas que no confían no se acercaran y evitarán hacer contacto e incluso terminarán relaciones.
La reputación es un factor importante en muchos campos como, la educación, negocios, comunidades en línea o estatus social. Es un componente de nuestra identidad como personas (físicas o morales), desde la perspectiva de los demás.
Se sabe que la reputación debe ser omnipresente y espontánea, no es algo de un día sí y otro no, de alguna manera se vuelve un mecanismo de influencia, pero que también puede afectar desde la vida cotidiana hasta relaciones de negocios, laborales, etc.
La reputación personal suma o resta a la reputación de las corporaciones (familias, empresas) que a su vez conforman la reputación de sociedades que terminarán impactando la reputación de un país.
¿Qué elementos o acciones conforman la reputación de na persona?
Pues bien, todo empieza a sumar desde que se nace, la reputación de nuestros antecesores y también la estructura demográfica a la que pertenecemos. El desarrollo académico, es decir la forma en que decidimos prepararnos para ser profesionales , cuando iniciamos nuestro desarrollo profesional va sumando a esta reputación con las decisiones y comportamientos que tengamos en ese ámbito, incluido aquí en desarrollo económico.
La ética y la moral, nuestros comportamientos en la sociedad .La forma en la que se establecen y mantiene las relaciones sociales en todos los frentes (familiar, laboral, social, resto del mundo) durante la vida.
El cómo una persona integra a su personalidad la suma del resto de los desarrollos, la forma de afrontar personalmente estos desarrollos lo habilitan para definir su actitud ante las circunstancias.
La suma de la reputación de las personas y el valor que agregan a sus empresas, conforma la reputación de las empresas.
En la actualidad las redes han cambiado la forma en la que debemos trabajar para posicionarnos en la mente de nuestros clientes, amigos, familia, etc. Debemos alinear nuestra reputación tanto en el mundo off como en el on line, y es aquí cuando debemos decidir cómo capitalizaremos cada uno de nuestro desarrollo en cada uno de los roles que tenemos a lo largo dela v ida y las decisiones que tomamos.
Para que nos quede claro las áreas que debemos trabajar y que van fortalecer nuestra reputación de son:
- Profesional
- Familiar
- Social
- Personal
- Académico
- Cívico
El secreto del éxito para la buena gestión de nuestra reputación está en la estrategia de comunicación, el plan de integración de herramientas, la afinación de la ejecución, tener métricas y la capacidad de cada persona para que el mercado se interese y genere una recomendación.
El desarrollo y mantenimiento de la reputación positiva requiere de mucho tiempo y acciones constantes, sin embargo para hacerla negativa basta con una acción. Ten en cuenta que la reputación puede ser el diferencial que necesitamos para diferenciarnos en lo profesional.
Cuida tu capital reputacional lo más que te sea posible, piensa antes y planea de forma consciente, pues trabajar en cambiar una reputación negativa te llevara el triple de esfuerzo.
Una de las claves para mantener una reputación positiva es la coherencia, lo que sientes, lo que piensas, lo que dices y lo que haces deben estar en concordancia. Cuando logramos esa concordancia logramos generar confianza y credibilidad frente a los demás.