Seguramente buscando servicios o consultoría para posicionar tu marca personal te encuentras que todos te dicen tienes que lanzar un podcast, crear un canal de YouTube o escribir en LinkedIn para destacar. Si bien crear contenido de calidad es una forma efectiva de posicionamiento de marca personal, no es la única.
Estamos hablando de una estrategia que rara vez verás en cursos de personal branding o con pseudo gurús de la marca personal: Silent Value Strategy, o cómo construir relaciones profesionales poderosas sin necesidad de convertirte en creador de contenido.
No estoy diciendo que el contenido no tenga valor. Lo tiene. Pero si no es lo tuyo, si no tienes tiempo, o simplemente no te gusta estar expuesto, el SVS puede ser el camino ideal.
La Silent Value Strategy no es sinónimo de inacción, ni de cerca, esta confusión está costándole oportunidades importantes a muchos profesionales.
¿Cómo se ve esto en acción? Te lo desgloso:
1️⃣ Defines tu red de contactos. No hablo de tener 500+ conexiones en LinkedIn que ni conoces. Hablo de mapear estratégicamente quiénes son las personas que realmente importan para tus objetivos profesionales. Esto requiere investigación, análisis y claridad brutal sobre hacia dónde vas.
No se trata de acumular contactos, sino de identificar la red que realmente importa para tus objetivos profesionales. Esto implica:
- Segmentación por niveles de influencia:
- Círculo interno (5-10 personas): Relaciones de alto impacto mutuo
- Círculo medio (20-30 personas): Conexiones de valor estratégico
- Círculo externo: Red de apoyo y conocimiento
- Evaluación de reciprocidad potencial:
- ¿Qué valor puedo ofrecerles?
- ¿Qué valor pueden aportarme?
2️⃣ Evalúas los niveles con un círculo de networking. No todos los contactos son iguales. Necesitas identificar tu círculo íntimo (quienes te recomendarían sin dudarlo), tu círculo estratégico (personas con influencia en tu sector) y tu círculo de oportunidad (contactos que aún no conoces pero necesitas cultivar).
3️⃣ Defines stakeholders y conectores clave. Aquí está la magia: identificas quiénes son esas personas que, si te perciben como alguien valioso, pueden transformar tu carrera. No es casualidad. Es estrategia pura.
El verdadero poder está en reconocer:
- Stakeholders de percepción: Personas cuya opinión sobre ti influye en tu reputación
- Superconectores: Individuos con redes amplias y diversas
- Puentes estratégicos: Contactos que pueden unir mundos aparentemente desconectados
Técnica probada: Crear una «matriz de influencia» donde evalúas:
- Nivel de acceso a oportunidades
- Capacidad de afectar tu reputación
- Potencial de colaboración futura
¿Y sabes qué pasa cuando ejecutas correctamente? Que mientras los proyectos crecen en nivel, el co-branding va impulsando tu marca personal por consecuencia. Y esto puede manifestarse de múltiples formas: puede ser con la empresa para la que trabajas, donde tu nombre comienza a asociarse con los proyectos exitosos de la compañía. O puede ser a través de proyectos personales que impulsas, organizaciones en las que participas o causas sociales con las que te involucras.
El co-branding estratégico ocurre cuando:
- Te asocias en iniciativas con actores de mayor trayectoria
- Participas en proyectos visibles dentro de tu industria (no necesariamente públicos)
- Generas resultados tangibles que otros quieren asociar contigo
¿Significa esto que nunca deberías considerar crear contenido? No.
Significa que hay más de un camino para desarrollar una marca personal poderosa, y que debes elegir el que mejor se alinee con quien eres, dónde estás y a dónde quieres llegar.
Si requieres apoyo con tu marca personal, escríbenos para poder apoyarte.